Historias del Fetish Club -3-

Si le pides al personal del Club por el "plato rojo",

 te llevarán hasta uno de los rincones y te acomodarán bien asegurado con cuerdas ofreciendo el culo. 

El "plato" es mullido al principio, pero con el correr del tiempo no te parecerá tan confortable.

Te distraerán de la incomodidad las sucesivas vergas que te irán trajinando el culo  hasta que el Club cierre.

Porque de allí nadie te saca, tu lo elegiste y no hay vuelta atrás.

Algunos Machitos viciosos del personal a veces te dan propina cuando ya se ha ido el último cliente.

Terminas molido, pero como eres una puta muy viciosa, no tardarás en repetir otra noche.