Los empleados abandonan el depósito y juntos salen a tomar unos tragos en el bar de siempre; bien merecido lo tienen.
Pero uno de ellos, que es muy puta, como la excepción que nunca falta, ha disimulado lo caliente que lo ponen los machos y está dispuesto ha descargarse allí mismo dedicándoles una paja a sus compañeros.
Lo que no sospecha es que no está solo... y vaya sorpresa que le espera!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario