Sus hombres son tan bellos que deben ser castigados por su arrogancia física.
Los que desean poseerlos hacen grandes esfuerzos para conseguirlos, tantos esfuerzos que pueden dañar de forma permanente la belleza.
Es como si el captor les dijera: "Puedes tener el cuerpo perfecto, mi nene, pero yo tengo el poder de apoderarme y destruir tu belleza."
Cavelo pone la belleza confrontando con la bestia y te convierte en testigo del horror que está a punto de ocurrir.
Más obras obras de Cavalo publicadas en PERROS en los siguientes links:
No hay comentarios.:
Publicar un comentario